Los mástiles de los veleros
ladean de un lado al otro
al compás de la lluvia y el viento.
Poder verlo desde el otro lado del vidrio
hace que pueda interpretar la canción de cuna
que nos canta la naturaleza
todos los días.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.