Ushuaia

Te extraño, extraño tu carácter de viento rebelde
la forma de tus figuras,
tu calma espejada,
tus días eternos y cortos,
las facciones de tus atardeceres,
los silencios silbados,
la complicidad de respirar hondo en algún momento del día,
extraño el no cansarme de mirarte... a cada segundo
extraño la rigidez de tu clima, tus 360 grados vistos de arriba,
tus constantes desafíos,
tus calles empinadas,
tus colores, cada mañana distintos,  cada atardecer ardientes,
tu helada calidez,
tu sentirme en mi lugar,
tu constante enamorarme,
tu reflejo de noche… tu valle, tu sol, tus montañas, tus glaciares,
tus matices de azul y blanco, tu luna enorme asomando,
tu ruta, siempre extraño tu ruta.
Te extraño Ushuaia…a veces lagrimeo de extrañarte,
es así, mi corazón late fuerte cada vez que veo una foto tuya
porque estas dentro mío, porque te llevo en la retina,
porque me enseñaste a comenzar en cada nuevo silencio,
porque me enseñaste a caminar en las situaciones mas adversas,
porque me enamore de vos una tarde, y no te voy a dejar de amar.

A mi abuela Rosita

Abu...
andarás por ahí taconeando el cielo,
baldeando las nubes,
jugando con las estrellas...
andarás por ahí aportándole tu luz al sol, haciéndolo mas fuerte y mas acogedor.
Abuela no hay un día que no te ame...
que no te extrañe...
que no necesite tu voz,
tu presencia,
tu mirada luminosa al verme
.... te amo.

Como cada año te dedico este pedacito de poema...y te siento y te guardo fuerte en mi corazón.

Ella era mi norte, mi sur, mi este, mi oeste
Mi semana de trabajo y mi domingo de descanso
Mi mediodía, mi medianoche, mi conversación, mi canción
Pensé que el amor duraría para siempre : Me equivoqué
Ahora no se necesitan las estrellas, saquenlas todas
Llévense la luna, desmantelen el sol
Vacíen el océano y limpien el fondo
Pues nada ahora podrá ser como antes.

Wystan Hugh Auden

Cuando tengas ganas

Cuando tengas ganas de ser...se
cuando tengas ganas de reír...reite
cuando tengas ganas de comerte el mundo...hacelo
cuando estés triste, respetatelo
cuando tengas ganas de estar en la cama... hace fiaca
cuando quieras sentirte la más importante, sentilo
cuando quieras sentirte la más chiquitita, también sentilo
cuando te sientas más que otro, manejalo
cuando te sientas menos que otro, superalo
cuando no te reconozcan tu esfuerzo, pensa que el 100% de las cosas lo haces por vos
cuando te agradezcan el esfuerzo, felicitate y agradece.

Cuando alguno de estos sentimientos dura más de dos o tres días, pensalo…
…eso sí,
cuando la felicidad te invade, disfrutala, abrazala y trata de retenerla. 

Ninguna decisión es completa

Ninguna decisión es completa,
el 90% de la decisión es ganancia, pero
hay algo ahí, en el otro 10%
que es muy difícil de resignar,
de aceptar, de cerrar.
 Por lo general ese 10% toma un aspecto protagónico de negación,
a veces hasta de frustración, en mi caso
se traduce en ruidos, ruidos externos que en realidad están adentro
y que por esa falta de resignación me cuesta dejar de escuchar.

Ninguna decisión es completa,
yo tome la decisión más importante de mi vida (hasta hoy)
y soy feliz con los pasos dados,
será cuestión de atrapar aquel 10%
que dejo flotar...

...llegará así el silencio,
llegará por fin la paz.

Creer...

Creer...
de eso se trata...
de creer en uno,
de creer en algo mas allá de uno,
de creer en el bien común,
de creer en el amor, de creer en la amistad,
de creer que se puede,
y de creer que no se pude también como para poder entender, intentar y superarse,
de creer que cada día que nace es una nueva oportunidad,
de creer que si algo no funcionó fue lo mejor para uno,
de creer intensamente en nuestros pensamientos, en nuestras acciones, en nuestras luchas, en nuestras causas, en nuestros aciertos y desaciertos...
¿de creer? la interminable pregunta de creer en algo mas, en un hilo conductor, en un guia, en varios, en todos,
de creer que todos los caminos confluyen en un mismo camino, el tuyo, el mio, el de todos.
Creer, de eso también se trata el día a día...
de creer, en uno.

Decisiones cotidianas (o la imposibilidad de vivir)

Hoy decidí qué comer, agarre cualquier cosa de la heladera la puse en mi plato y comí.

Nada especial, absolutamente nada,

comí unos tirabuzones que tenía con una salsa boloñesa congelada,

una decisión, un pequeña decisión que

resulta ser vital si tengo en cuenta que es la comida del medio día de hoy
y, que si bien mañana voy a tener la posibilidad de elegir mi almuerzo nuevamente

el día de hoy ya paso, la comida de hoy ya paso

y fue un momento y una decisión que ya no va a volver a suceder tal cual como lo fue esta.

Eso es lo raro de la vida, si fuésemos consientes 

que cada pequeña decisión que tomamos es
única, irrepetible e inigualable

sería imposible vivir.